Pese a que el sector vivienda se vio afectado por el Covid-19 con una baja en la venta de propiedades nuevas de entre 35 y 55 por ciento, en la Ciudad de México; este año cierra con la posibilidad de una vacuna, que en el mejor de los casos, comenzaría a aplicarse en el primer semestre de 2021, lo cual, generará un ambiente de mayor confianza.
Aunado a esto, existen otras razones que ayudarán a dar mayor certeza a quienes tienen la intención de adquirir una casa, pero han detenido su compra por el contexto de incertidumbre.
La Sociedad Hipotecaria Federal ha detectado que el costo de la vivienda en la capital mexicana registra las menores alzas en su historia, con una variación de 2.3% en su apreciación, porcentaje guiado por el aumento del sector residencial y residencial plus.
Este ha sido el aumento más bajo en más de una década en la región del Valle de México, lo cual, representa una buena oportunidad para los compradores.
Ante este panorama, es poco probable que se vea un despunte dramático de nuevo, por lo que se espera un primer semestre de 2021 con un aumento mínimo en el costo de propiedades nuevas o de uso.
Uno de los rubros que no simplemente conservará precios bajos, sino que también podría experimentar descuentos importantes para mantenerse competitivo y dinámico, es el de inmuebles de segunda mano.
Esta depreciación no es una constante, por lo que los precios regresarán a la normalidad en algunos meses, y ahora debe aprovecharse el momento.
En momentos de crisis, las propiedades inmobiliarias continúan siendo una opción razonable para resguardar el valor del dinero. Como se ha podido observar, pese a que la crisis azota muchas industrias, los precios de la vivienda no registran cambios considerables ni bajas permanentes, demostrando que el mercado de bienes raíces sabe proteger los activos.
En este caso, la recomendación es buscar casas nuevas o de uso, con buena ubicación y que integren los factores adecuados de rentabilidad: una no muy grande, que no requiera una remodelación muy costosa, flexible para una familia pequeña.
Una de las razones más importantes, es que la banca ha tomado en cuenta la necesidad de de impulsar el mercado de vivienda, por lo que hoy se pueden encontrar facilidades inéditas en los últimos diez o quince años, que incluyen tasas de crédito hipotecario por debajo del 7%.
Es importante considerar la tasa de referencia del Banco de México, la cual, después de una tendencia a la baja se ha detenido en 4.25 por ciento.
Todo parece indicar que no bajará mucho más de este número, así que las facilidades bancarias no mejorarán demasiado en relación a lo que ofrecen actualmente, por lo cual, el cierre de este año y el inicio del próximo cuentan con buenas oportunidades para adquirir una propiedad.