La biblioteca de Metten, es una joya barroca del sur de Alemania.
Las bibliotecas esconden tesoros no sólo en sus estanterías, sino que muchas lo son en sí mismas. Recorriendo el mundo, nos encontramos con bibliotecas y librerías que nos dejan sin aliento. Espacios luminosos, de complejos pasillos, barrocos, que parecen catedrales, o la última obra de ingeniería más vanguardista, para que el placer de abrir un libro se convierta en toda una adicción.
Bibliotecas tan longevas como la de la ‘Abadía de Metten’, son escasas en Alemania. La Reforma, la Guerra de los Treinta Años y la Secularización; llevaron al cierre muchas de ellas. En el siglo XVIII, sus tres salas, se rediseñaron según el gusto del Barroco.
Fundada en 766, en Baviera, se encuentra en la zona de ensueño entre el bosque bávaro y el Danubio. Aunque su ubicación está firmemente en el suelo, parece que su biblioteca cayó directamente del cielo.
Sin embargo, su acervo no es tan antiguo como pudiera esperarse, pues entre 1803 y 1815, su contenido fue confiscado y subastado después, de que el edificio pasara a poder del Estado. Cientos de libros pasaron a formar parte de las bibliotecas municipales y de diversas universidades. En 1830, se reestableció la Abadía, a la que se le añadió una escuela, regresando algunos de las obras originales de la biblioteca, así como el incremento de su acervo, gracias a las donaciones del Estado y de otros monasterios cerrados.
Los visitantes entran debajo de las figuras alegóricas de la sabiduría y la religión, que se ciernen desde el techo. Su elaborada decoración de estuco, y sus enormes estanterías contienen 35,000 volúmenes.
De particular importancia es el ‘Mettener Antiphonar’, de 1437, con las letras y melodías de todas las canciones del breviario, y un recibo de 1715, por 500 florines pagados al artista alemán Cosmas Damian Asam, quien pintó el retablo del monasterio.
En 2009, la abadía presentó la ‘Nueva Biblioteca’, ubicada a ambos lados del patio del monasterio, y decorada con vívidos paneles de vidrieras, del artista Robert M. Weber, con sede en Munich. La ‘Nueva Biblioteca’, fue creada por la necesidad de más espacio, y ofrece espacio para unos 300,000 libros.