El aeropuerto internacional de Singapur, también conocido como “Changi”, por encontrarse en la zona del mismo nombre, es una terminal aérea muy especial; considerado el mejor del mundo, ganando en marzo de 2016 el premio “Skytrax” (considerados los Oscars del sector de la aviación) basado en millones de votos en encuestas de pasajeros. Fue inaugurado en julio de 1981, con modernas instalaciones, excelente esmero y, por supuesto, un funcionamiento a la perfección.
El éxito alcanzado por este aeropuerto, se debe al servicio eficiente de la gente que trabaja en él, hacia los pasajeros. Cuando llega el momento de que usted pase por inmigración, realizan esta operación rápidamente, pero, con sumo cuidado; la retirada del equipaje ¡no puede ser mejor!, la efectúan con agilidad asombrosa, algo agradable a los usuarios; una verdadera ventaja para los que tienen el privilegio de llegar a este magnífico lugar.
El aeropuerto “Changi” ha conservado un perfil admirable, en cuanto a actividades relacionadas con sus labores, donde la superior calidad se hace presente. Trabaja con vuelos internacionales, a numerosas partes del planeta; con terminales abiertas las veinticuatro horas del día, contando con un tren gratuito que los conecta y autobuses que salen cada 15 minutos; recibe 5.400 vuelos por semana, maneja un aproximado de 13.000 maletas por hora.
Este aeropuerto tiene un promedio de 50 millones de pasajeros por año, ofreciendo varios parques infantiles, bellos jardines cubiertos y al aire libre, zonas de “relax”, con equipos para masajes; muchísimas tiendas donde, además de encontrar ropa, zapatos y accesorios, hallará establecimientos con joyerías exclusivas de marcas reconocidas. Asimismo, varios restaurantes y una plaza de alimentación; a la par disfrutará relajantes piscinas, cines y hasta lavandería; es como transitar por una bella ciudad en pleno aeropuerto.
Además, si el tiempo de espera es superior a las cinco horas, usted puede recorrer la capital en un “tour” de dos horas completamente gratis. Igualmente, el aeropuerto de “Changi” le brinda cuatro horas de acceso gratuito a internet por su red “WiFi”; para recibir este servicio, solo debe ir a un punto de información solicitando una clave; allí mostrará su pasaporte, el cual escanean obteniendo una contraseña.
Su cuidada arquitectura, su amplia oferta comercial y de restauración y el lujo de sus instalaciones han hecho que el Aeropuerto Internacional Changi de Singapur conquiste a millones de pasajeros. El objetivo ahora es mantener ese preciado título y el camino para lograrlo pasa, a juicio de sus responsables, por la constante innovación.
Desde 2014, el aeropuerto no ha escatimado en recursos para seguir alzándose con esta distinción. Uno de los proyectos estrella que entonces se pusieron en marcha es el denominado Jewel ("joya"). Se trata de una estructura de vidrio y acero que permite que todo el interior se bañe en luz natural, obra del reputado arquitecto Moshe Safdie. Tiene cinco niveles con todo tipo de servicios e instalaciones, y donde la vegetación es la protagonista. Es una atracción en sí misma que deja a todos los viajeros y visitantes con la boca abierta mientras se mueven hacia tres de las cuatro terminales del aeropuerto. Su construcción tuvo un costo de 1.25 mil millones de dólares, y conectará con tres de las cuatro terminales del aeropuerto Changi. Además, los pasajeros de 26 aerolíneas –incluidas Singapore Airlines, Silk Air y Scoot– tendrán acceso a una sala de registro.
Dentro de esta enorme cúpula de vidrio y acero de diez niveles, los pasajeros encontrarán una impresionante cascada interior de 40 metros de altura -la más alta de su tipo en todo el mundo-, nubes artificiales y un jardín de cinco plantas, todo un esfuerzo para emular un entorno semejante al de una selva o un bosque que podrá apreciarse en todo su esplendor desde un conjunto de puentes suspendidos a 25 metros de altura. En su núcleo se encuentra un bosque interior llamado el Valle del Bosque de Shiseido, una atracción de jardín en terrazas con más de 120 especies de plantas de gran tamaño, 900 árboles, pequeñas cascadas, y distintos senderos empedrados en los que poder realizar caminatas.
Pero lo más espectacular puede verse desde cualquier punto; un chorro que vierte agua desde el vértice del techo de cristal hasta el centro del edificio, el Rain Vortex, la cascada interior más alta del mundo con 40 metros que transporta casi 38.000 litros de agua por minuto, transformándose en un espectáculo de luz y sonido por la noche. El agua de lluvia, de las frecuentes tormentas en la región, es recogida para abastecer el complejo, incluida su espectacular catarata.
Los encargados de romper este 'espejismo' de naturaleza serán las decenas de zonas de ocio y restauración, el hotel de 130 habitaciones y las cerca de 300 tiendas que albergará en su interior.
Jewel tiene una forma rosca. En él, se instaló un jardín de cinco pisos, en el cual hay 2 mil 500 árboles, 100 mil arbustos, senderos para dar un paseo.
En la parte superior al hotel, estará el Canopy Park, área que abarca 14 mil metros cuadrados (cerca de 11 piscinas olímpicas), y en la que se encuentra un puente suspendido de 50 metros de largo con un piso de vidrio, juegos, jardines, senderos y restaurantes. Éste estará abierto al público en general a mediados de este año.
El aeropuerto de “Changi” es una puerta de entrada y salida de Singapur; allí le darán una bienvenida como realmente lo merece. La atención brindada será de su total complacencia, queriendo regresar a un sitio, donde la comodidad del visitante es lo primero.