¿Se podría disponer de agua potable en casa sin tener que girar la llave de un grifo o abrir ninguna botella? Pues, esto es lo que promete un artefacto 'made in USA' que garantiza el suministro sin necesidad de engancharse a la red de distribución. Aunque no se trata de sacar agua de las piedras, la proeza no parece menos prodigiosa, pues el sorprendente chisme obtiene el vital elemento del lugar más inesperado y más ubicuo: el aire. Eso sí, sólo podrás amortizar los 1.000 euros que cuesta el aparato si vives en regiones con más de un 30% de humedad en el aire.
Element Four
Leo en el folleto que el artilugio puede saciar la sed de una familia media a un costo seis veces inferior al que le supondría hacerlo con agua embotellada. En concreto, produce hasta doce litros diarios de líquido para beber o cocinar. Así lo aseguran los portavoces de 'Element Four Water Mill', compañía especializada en generadores de agua atmosférica, más conocidos por el nombre comercial de 'WaterMill' (molino de agua).
¿Cómo funciona? En cierto sentido, de un modo parecido a los acondicionadores de aire: instalado en un punto exterior a la vivienda (techo, balcón, azotea, jardín…), el dispositivo absorbe aire, haciéndolo pasar a través de una sustancia refrigerante, que convierte la humedad atmosférica en gotas de agua. El líquido recogido pasa a través de un filtro de carbono especializado, siendo sometido a un esterilizador de rayos ultravioletas, con el propósito de eliminar cualquier tipo de bacterias, y de allí es dirigido a la pila, la nevera o a un depósito de agua. Su rendimiento aumenta en ocasión de tormentas, puesto que la lluvia multiplica la humedad del aire.
'WaterMill', de forma esférica e inmaculado diseño futurista, no desentonaría en la escenografía de una película de ciencia ficción. Es más: a los forofos del género les sonará familiar: se trata de un concepto similar al que nos mostraba la saga de 'La Guerra de las Galaxias', en relación con los granjeros de la humedad del planeta 'Tatooine', laboriosamente dedicados a cosechar el precioso H2O de la atmósfera de su árido mundo.
Tal como lo presentan, este electrodoméstico se perfila como una solución muy conveniente para las unidades familiares situadas en zonas sin agua potable, e igualmente para los amantes del agua pura que ven con malos ojos el despilfarro ambiental derivado de su embotellamiento en plástico.
El "deshumidificador" saldrá a la venta la próxima primavera, a un precio algo inferior a los mil euros. No sabemos cuánta energía necesita para producir un litro de agua, aunque el fabricante dice que muy poca, ya que "Watermill toma mediciones del ambiente cada tres minutos para determinar el grado de humedad y autorregularse de modo de operar unos pocos grados debajo de ese indicador, y así maximizar su eficiencia energética".
Evidentemente, la crisis de los recursos hídricos está generando muchas oportunidades de negocio. Hace unos años, visité una fábrica alemana en donde producían jarras equipadas con unos sofisticados filtros que atrapaban la más mínima impureza, en especial metales pesados (los alemanes desconfían del agua oficialmente potable). 'WaterMill' se enmarca en esa misma línea de productos orientados a consumidores cada vez más preocupados por la cantidad y calidad del agua que beben.
Pero no pensemos que ha llegado la panacea: en regiones en donde el nivel de humedad del aire se sitúe por debajo del 30%, 'WaterMill' no será rentable. Y tampoco se conocen todavía sus posibles "peros". En cualquier caso, 'Element Four' prevé acrecentar la dimensión 'ecologically-friendly' de su producto con nuevas innovaciones, con futuros modelos que funcionarán mediante paneles de energía solar o aerogeneradores.
En regiones en donde el nivel de humedad del aire se sitúe por debajo del 30 por ciento, 'WaterMill' no será rentable