En las próximas semanas el árbol de Navidad será motivo de alegría, su forma en punta, su color verde y las luces de sus ramas son símbolos de vida.
Todos tenemos uno en casa y, durante este mes, se convierte en el centro de atención y alegría. Es una costumbre que muchos disfrutan en familia. Todos los 8 de diciembre, el Día de la Inmaculada Concepción de María, se arma el arbolito y se decora la casa para recibir la Navidad.
Pero, ¿alguna vez se preguntó qué significa esta tradición y cuál es su origen? Lejos del costado comercial que se le imprime a estas fechas, en sus inicios, esta costumbre estuvo solo ligada a la religión, a la esperanza y a la bonanza.
Desde tiempos muy antiguos, los germanos estaban convencidos de que tanto la Tierra como los Astros, pendían de un árbol gigantesco, el Divino Idrasil o Árbol del Universo, cuyas raíces estaban en el infierno y su copa, en el cielo. Ellos, para celebrar el solsticio de invierno, decoraban un roble con antorchas y bailaban a su alrededor.
Alrededor del año 740, San Bonifacio (el evangelizador de Alemania e Inglaterra) derribó ese roble que representaba al Dios Odín y lo reemplazó por un pino, el símbolo del amor eterno de Dios. Este árbol fue adornado con manzanas (que para los cristianos representan las tentaciones) y velas (que simbolizaban la luz del mundo y la gracia divina). Al ser una especie perenne (dura mucho tiempo), el pino es el símbolo de la vida eterna.
Además, su forma de triángulo representa a la Santísima Trinidad.
En la Edad Media, esta costumbre se expandió en todo el viejo mundo y, luego de la conquista, llegó a América.
El primer árbol de Navidad, decorado tal como se conoce en la actualidad, se vio en Alemania en 1605 y se utilizó para ambientar la festividad en una época de extremo frío. A partir de ese momento, comenzó su difusión: a España llegó en 1870, a Finlandia en 1800, y en el Castillo de Windsor (en Inglaterra) se vio por primera vez en 1841, de la mano del Príncipe Alberto, el esposo de la Reina Victoria.
Los adornos más tradicionales del árbol de Navidad son:
• Estrella: colocada generalmente en la punta del árbol, representa la fe que debe guiar la vida del cristiano, recordando a la estrella que guió a los Magos hasta Belén.
• Esferas: en un principio, San Bonifacio adornó el árbol con manzanas, representando con ellas las tentaciones. Hoy día, se acostumbra a colocar bolas o esferas, que simbolizan los dones de Dios a los hombres.
• Lazos: tradicionalmente los lazos representan la unión de las familias y personas queridas alrededor de dones que se desea dar y recibir.
• Luces: en un principio las velas, representan la luz de Cristo.
• Regalos: recordando que es la fiesta de bienvenida del Niño Jesús, es como si éste recibiera un presente, el cual se termina dando a familiares y amigos.
Existen otras efigies representativas de la Navidad: los nacimientos, las coronas de adviento, las coronas de adorno, Santa Claus, los Reyes Magos, la cena de Nochebuena, las piñatas, las posadas, etc., pero éstas pertenecen a aquellas personas que las celebran según su país y religión, pero el árbol de Navidad, es universal.