La idea principal de una caja de ahorro es que cada miembro o socio ahorra su dinero mientras la entidad le ofrece rendimientos, o sea, la cantidad que ahorró más intereses.
Las cajas de ahorro no son entidades con intenciones de lucro, es decir, no se crean para funcionar como un negocio alternativo al de la empresa que las instituyó.
Actualmente están obligadas por la ley a aportar parte de sus beneficios a la obra social, por lo tanto las cajas de ahorro no tienen propietarios, sino gestores, no cotizan en la bolsa, por lo que no son sujetas a ser compradas por capital privado.
Se puede encontrar varias cajas de ahorro por lo que las autoridades financieras han mejorado la supervisión y regulación de éstas, aún así es nuestra responsabilidad el cuidar de nuestro patrimonio; por lo que si tienes dudas con respecto a éstas ten en cuanta algunos puntos antes de ingresar tu dinero a alguna:
• Verifica que la caja de ahorro esté legalmente constituida y afiliada a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
• Algunas cajas están en “proceso” de afiliarse legalmente, pregunta a la CNVB.
• En 2001 se aprobó una ley para formalizar las cajas de ahorro. Todavía hay muchas fuera y las que sí están formales tienen un “sello”, pídelo a la entidad a la que quieres pertenecer.
• Haz una lista de dudas en relación a tu ahorro o crédito y pregunta a los ejecutivos de la caja.
• Lee muy bien los contratos y las condiciones particulares de tu ahorro o crédito. Esto evita muchas sorpresas.
• Pregunta por todas las opciones de productos que ofrecen y analiza cuál te conviene más.
• Y cómo siempre: NO pongas TODO tu dinero en un solo lugar. Esta es la mejor estrategia para protegerte en caso de catástrofe.
Uno de los beneficios de pertenecer a una caja de ahorro es que ésta ofrece créditos a sus asociados, los cuales se descuentan vía nómina, por lo que no existe riesgo de contraer deudas que aumenten por intereses moratorios, ya que el descuento es automático en la nómina del colaborador.
En términos generales, y para efectos del trabajador podemos decir que las cajas de ahorro representan muy grandes ventajas para los colaboradores pues, mediante descuentos vía nómina el trabajador puede ir forjando una cultura de ahorro más fácilmente que si depositara directamente en ventanilla de un banco.