Pasamos más de una tercera parte de la vida durmiendo. Pero, no se trata solo de dormir, sino de hacerlo el número suficiente de horas, y de que el sueño sea de calidad.
El sueño tiene un impacto sobre todos los aspectos de nuestras vidas, desde el rendimiento en el trabajo, y nuestras interacciones con nuestros seres queridos, hasta la salud a largo plazo y nuestro bienestar mental.
Disfrutar de un buen descanso, es fundamental para reponerse, y así recuperar la energía necesaria para afrontar el día a día, en mucho mejores condiciones.
Cuando el descanso no es suficiente o es incorrecto, el bienestar físico y mental se resienten. A continuación le ofrecemos unos valiosos consejos que le ayudarán a dormir más y mejor, mejorando sus hábitos de descanso en beneficio de su salud.
Procure irse a dormir siempre a la misma hora. Esto hará que su cuerpo interprete adecuadamente las señales para comenzar los procesos previos al sueño.
Evite situaciones estresantes o que activen sus sentidos. Apague las pantallas de televisión, computadoras, teléfonos, tabletas antes de irse a la cama; si le cuesta conciliar el sueño.
Nada de discusiones ni situaciones que le alteren antes de irse a la cama. Así que si su hijo o un familiar le alteran, procure evitarlas.
Realice ejercicio físico. El cansancio físico le ayudará a entrar más fácilmente en una situación de sueño y éste será más profundo y reparador. Pero no se ponga a hacer deporte las horas previas a dormir, porque pueden provocar el efecto contrario.
Cuide su alimentación. Reduzca o elimine del todo la cafeína o la teína, evite alimentos que le puedan causar flatulencias. Una dieta baja en grasas, puede ser una buena opción.