Estas camas son lo más trendy en la decoración infantil. Además de tener múltiples beneficios para los pequeños.
Es muy importante que su bebé cuente con un lugar acogedor para dormir, especialmente porque el sueño y descanso de los niños es uno de los temas más importantes para asegurar su buen desarrollo y crecimiento. Actualmente hay infinidades de teorías respecto a la hora de dormir de los pequeños, desde la práctica del colecho, pasando por los diferentes tipos de cunas, hasta los diseños de camas más modernos y educativos.
Si está buscando la primera cama para su bebe, las casitas de madera pueden ser la opción perfecta. El paso de la cuna a la cama de mayores es muy importante para los niños, y también para los padres. Una cama que les de seguridad, en la que les guste pasar la noche, es garantía de un sueño reparador para ellos…¡y para toda la familia!
Las camas casita, de inspiración Montessori son bajas, diseñadas a ras del suelo. Se recomiendan desde que el bebé comienza a gatear y explorar por sí mismo, y al estar a su nivel, fomentan su curiosidad, su autonomía y su crecimiento personal. Sus beneficios son múltiples, en comparación con las camas de diseño convencional.
Estimulan la autonomía e independencia
Estas camas no solo están adaptadas al tamaño de los niños, sino también a su nivel de desarrollo. Permiten que el niño adquiera una mayor autonomía desde una edad temprana, facilitándole que descubra su nuevo entorno, ya que puede subir y bajar cuando lo desee, leer un cuento o jugar. Además, el hecho de poder acostarse cuando tenga sueño, facilita la toma de decisiones autónomas.
Son seguras
Dado que las camas se encuentran prácticamente al nivel del suelo, no existe la posibilidad de que el pequeño se caiga y lastime. Además, al eliminar los típicos barrotes de las cunas, también desaparece el riesgo de que el bebé se quede atrapado entre ellos.
Fomentan el aprendizaje
Las cunas infantiles limitan la libertad de movimiento de los bebés, quienes deben quedarse en ellas hasta que lleguen los padres. La experiencia de estar ‘encerrados’ no suele ser muy agradable para ellos. Estas camas, al contrario, les brindan la libertad de moverse por la habitación y descubrir su entorno, sin la ayuda de los adultos, de manera que fomentan el aprendizaje autónomo.
Además, estas camas quedan perfectas en diferentes ambientes, como modernos o románticos chic, todo depende del aire que le dé.
Se pueden encontrar tanto en madera natural, como en colores que van desde el blanco y negro ( para ambientes más modernos de estilo nórdico), hasta menta y rosa (para más románticos).
Dan mucho juego, ya que permiten decorarlas con un sinfín de elementos: guirnaldas, banderines, tules y cojines, el resultado siempre es el mismo, un ambiente acogedor repleto de magia, donde los pequeños no querrán salir.
Una simple estructura que estimula el sueño, el juego y la creatividad, sin perder la seguridad de los pequeños.