La ‘Casa Malaparte’ se asienta sobre un peligroso acantilado a 32 m sobre el nivel del mar, con vistas al Golfo de Salerno.
La ‘Casa Malaparte’, es una obra arquitectónica moderna de 1937, considerada por mucho tiempo como obra del arquitecto italiano Adalberto Libera y actualmente atribuida a su dueño, el escritor Curzio Malaparte.
Haber elegido construir su casa en ese lugar encantado no fue casual, la idea fija de Malaparte, era poseer una casa para sí en el golfo de Nápoles, y en particular Capri, representaba una síntesis perfecta de los elementos esenciales de su búsqueda, de soledad y de amor; pero también un reto consigo mismo para la realización de una empresa considerada imposible.
Malaparte escribió un ensayo explicando sus intenciones para la ‘Casa Malaparte’, en el que explicaba que con la casa se construía a sí mismo, y que sería su propio retrato en piedra.
Materiales:
·Albañilería típica mediterránea de la época, ladrillos, cemento, piedra.
·Marcos de madera en puertas y ventanas.
·Bañera de mármol del dormitorio principal, como también en el revestimiento de algunas paredes.
·El piso, hecho de losas de piedra áspera en el gran salón y con cerámicos decorados en muchas de las otras estancias, como habitaciones, atrio y baños.
·Vidrio refractario especial en la pared del fondo de la chimenea.
·Pintura exterior rojo Pompeya, interiores pintura blanca.
Espacios:
El edificio se articula en 3 niveles, en la cumbre se extiende una amplia terraza al mar, al que se llega recorriendo una escalinata con corte trapezoidal, que se adapta perfectamente a ese tramo de roca.
Esta casa, es un paralelepípedo de albañilería roja, entallada por una monumental escalera en pirámide invertida que conduce a una cubierta plana, utilizada como solárium. Un muro blanco en curva libre, se desarrolla sobre el tejado.
En la planta baja, además de un ala de huéspedes, hay una sala de Tirol con una estufa de leña.
En la primera planta, cuartos y baños de mármol en estilo pompeyano, se combinan con un inmenso atrio como sala de recepción, es moderno y arcaico, romántico y a la vez vincula elementos clásicos. También alberga una biblioteca. El gran salón en el centro del edificio oblongo, es como el patio de un pequeño castillo.
En una de las paredes, hay una gran chimenea, y en otro de los muros un gran relieve de Pericle Tazzini, contemporáneo de Malaparte, entretejido con figuras humanas que recuerdan los relieves eróticos de las fachadas en los antiguos templos de Kajuraho, India.