La comida de navidad en México, es un sincretismo de culturas. En cada familia se festeja de manera distinta de acuerdo al contexto y al estado en el que se vive.
Se pueden apreciar árboles nevados, figuras de renos y santa clauses por todas partes, pero por fortuna se conservan tradiciones mexicanas como las posadas o la procesión de la rama.
Existen verdaderos clásicos de la comida de navidad, esos que pruebas una y otra vez en los múltiples recalentados con los seres queridos y que se comparten al centro y que se vuelven a comer en la cena de año nuevo.
Romeritos
Estos quelites se preparan con algún mole y se acompañan también, con tortas de camarón seco y nopales.
La receta original se hacía con tortita de ahuautle (la
hueva del mosco que habitaba en las islas del lago de texcoco, y hoy día es muy difícil de conseguir).
También son alimento de cuaresma y se comen el 24, porque antes era un día de guarda. Una de las principales comunidades productoras de este ingrediente en la ciudad de México, es San Andrés Mixquic.
Pavo
Esta ave es el manjar de festejos como el ‘Día de Acción de Gracias’ y la ‘Navidad’, en América del Norte y Europa, donde se come relleno u horneado y salseado. En México, se le llama guajolote y es la estrella en bodas, cumpleaños y fiestas patronales. Otras formas de llamarle al emplumado son huexólotl, ‘cócono’, ‘chumpipe’ o ‘totol’ y se criaba y consumía, desde tiempos prehispánicos.
Ponche
Este brebaje es típico y reconfortante, en estas fiestas. Se prepara con frutas de la temporada como: guayaba, tejocote, ciruela y piña cocidas y mezcladas con caña de azúcar, piloncillo y canela.
Un plus es que para dar más calor al un chorrito de alguna bebida alcohólica. Dicen las abuelas que lo más especial del ponche, es que entre más hervores tenga, más se concentra el dulzor. Lo cierto es que hay que cuidar la fruta, para que no se termine comiendo un puré.
Bacalao
En México se come el llamado a la vizcaína que nada tiene que ver con el de Vizcaya. La versión mexicana lleva aceitunas, alcaparras, chiles güeros, orégano, pimienta y jitomate. En cambio, en la vasca no falta la salsa vizcaína, que es un sofrito de tomates, pimientos, ajos picados y cebollas.
Se aprecia que existen recetas únicas que dan sabor a las fiestas decembrinas en cada hogar. Esas memorias son las que dan valor a cualquier festejo.