El acabado en Chukum refleja la esencia de nuestros ancestros en espacios auténticos, resaltando un estilo de vida en armonía con lo natural.
La cultura maya llamó CHUKUM al árbol de leguminosas y espinos, que dio color a sus pieles y murales; y en contraste con su naturaleza silvestre, hoy brinda armonía natural a los acabados, aplicándose en todo tipo de superficies, especialmente en muros, piscinas, mesetas y pisos entre otros.
Su aplicación se basa en una antigua técnica maya empleada para el recubrimiento de superficies, gracias a sus propiedades impermeables.
En el silgo XIX (época de auge del henequén en Yucatán) la técnica del Chukum se implementa en las superficies de los estanques de las haciendas.
En la actualidad la arquitectura contemporánea ha rescatado dicha técnica no solo por sus cualidades impermeables, sino también por la textura orgánica que embellecen las obras arquitectónicas.
Resulta ideal para albercas, fuentes y espejos de agua, debido a sus propiedades impermeables y plasticidad evita filtraciones.
El Chukum brinda acabados irrepetibles, creando espacios con ambientes naturales y únicos. Por lo que en la actualidad, es preferido por arquitectos y diseñadores cuando se trata de darle un estilo natural a sus proyectos.
• Es un producto 100% natural
• Económico
• De fácil aplicación.
En cuanto a su aplicación estás serían algunas recomendaciones:
• Aplicarse sobre superficie en acabado emparche o aplanado rustico, preferentemente de polvo y cemento.
• Presentar el acabado pulido en albercas, fuentes, y espejos de agua para evitar formación de hongos, y facilitar su limpieza.
• Es importante aplicar muros completos, previendo que se hayan realizado en su totalidad las instalaciones sanitarias y eléctricas antes de aplicar para evitar resanes futuros.