¿No puede destinar una habitación a que jueguen los niños? No se preocupe, aquí le enseñamos otras opciones.

La televisión y la tecnología monopolizan hoy la mayor parte del tiempo libre de los niños, pero si, además, y como sucede ahora con el coronavirus, tienen que pasar todo el día en casa conviene agudizar el ingenio para que jueguen un rato y dejen de lado tabletas, tele y computadoras. Aunque somos conscientes de que es difícil poder destinar una habitación exclusivamente a cuarto de juegos, en realidad con un poco de imaginación puede montar un rincón de juegos, aunque el espacio sea mínimo. Le proponemos algunas ideas que le pueden servir de inspiración para que la adapte a su medida. Sus hijos lo agradecerán.

1. Un lugar de juegos que aprovecha la escalera. Si la tiene, valore dar uso a las zonas muertas que, a menudo, dejan las escaleras. Puede, por ejemplo, construir una casita en un espacio aparentemente inútil. Sus hijos agradecerán poder tener sus momentos de intimidad mientras se divierten.

2. Un tipi para el cuarto de estar o el dormitorio. Aquí le proponemos una idea fácil: un tipi estilo indio. Desde luego, no resta tanto espacio al salón y le aseguramos que divertirá mucho a los niños porque tendrán un lugar donde jugar y refugiarse al mismo tiempo.

3. Jugar en su propio dormitorio. Si tiene espacio en su habitación, que mejor. En caso de que no sea muy amplia, instale una litera en vez de una cama normal ya que podrá aprovechar toda la parte inferior que queda libre como zona de juegos. Si además la cierra con una tela a modo de cortina, se convertirá en su escondite secreto o en un lugar donde, por ejemplo, jugar a hacer una función de teatro.

4. También se puede jugar estudiando. Con un gesto tan sencillo como pintar una pared con pintura de pizarra los niños podrán garabatear a su gusto, escribir mensajes y hasta repasar la lección. Es un recurso fácil y realmente económico.

5. Anímelos a hacerse su propio despacho. Con el coronavirus, todos estamos trabajando en casa. Ellos también necesitan estudiar. No necesita ni un metro cuadrado para tener una mesa donde jueguen y estudien. Si opta por una que tenga el tablero de pizarra, los pequeños disfrutarán mucho dibujando en ella y será muy útil también cuando empiecen a practicar la escritura. Además, ¡no habrá hojas de papel por todas partes!

6. Un minirrocódromo para jugar en casa. Cree un muro de escalada vertical en casa. Este pequeño rocódromo doméstico, igual hasta también lo usa usted mismo.

7. La playa en casa. Esta es para los que tengan un jardín o un patio. La arena es un material con el que se entretienen mucho los niños porque les permite realizar construcciones y si se descalzan les encanta su tacto. Si tiene una terraza o un jardín con algo de metros libres, destine una pequeña área a un arenero infantil. No le costará mucho hacerlo –busque en casa si tiene alguna madera, plásticos, incluso cartones que le ayuden a definir un espacio– y piense que no va a ser para siempre.