Esta cueva de Gibraltar, alberga el primer diseño abstracto realizado de manera intencionada por los neandertales, que ha sido encontrado hasta ahora.
La cueva de Gorham, es una cueva del peñón de Gibraltar, promontorio y territorio británico en ultramar, en la costa sur de España. Considerada como uno de los últimos lugares habitados por los neandertales (especie extinta de homínido, que convivió con el Homo sapiens). La cueva fue descubierta por el capitán británico A. Gorham en 1907, de ahí su nombre. Aunque no adquirió importancia como yacimiento arqueológico hasta los años 40, cuando se percataron de ello los miembros de la Royal Electrical Ingenier. John d´Arcy Waechter, miembro del Instituto Británico de Arqueología en Ankara, a propuesta de Ms. Garrod, realizó varias campañas de excavaciones entre 1948 y 1954, en la zona externa de la cavidad.
En 1991, se reanudaron las excavaciones por un equipo de investigación bajo la dirección de Clive Finlayson, y la colaboración del Museo de Historia Natural de Londres. En 1994, se constituyó ‘The Gibraltar Cave Project’, bajo el liderazgo de Finlayson, con la colaboración de C. Striger (Museo de Historia Natural). En 2012, la investigación del museo reveló el modo en que los neandertales utilizaban los recursos marinos, y en 2013, se descubrió un hacha pulida a mano, datada en alrededor de 7.500 años, del periodo neolítico. En 2014, un estudio realizado por un equipo internacional, encabezado por Ruth Blasco y Clive Finlayson, determinó que los neandertales cazaban palomas salvajes, y éstas formaban parte de su dieta, tras observar en algunos de estos huesos, marcas de cortes y signos de cremación.
Pero fue en septiembre de 2014, cuando se realizó el descubrimiento que, según los especialistas, obligaría a redefinir la Prehistoria. Hasta entonces, la producción de pinturas rupestres y grabados en las paredes de las cuevas se consideraba fruto de la evolución humana, y una capacidad exclusiva de los humanos modernos, que llegaron a Europa occidental hace unos 40.000 años. A partir del descubrimiento de este grabado, que originó un estudio internacional publicado en la revista científica PNAS, se observó por primera vez un diseño abstracto hecho por neandertales. El grabado, del tamaño de la palma de una mano y realizado sobre una roca, es un trazado de líneas cruzadas en ángulo recto. El hallazgo se sumaba a otras evidencias encontradas en otros yacimientos neandertales, como el uso de pigmentos o las pruebas de enterramientos intencionados, señales de que la capacidad cognitiva de los neandertales, es mayor de la que se les había atribuido hasta entonces.
Cuándo dejó de habitar el planeta, sigue siendo objeto de debate entre los científicos, que sitúan su desaparición entre 41.000 y 24.000 años. Las cuatro cuevas que se abren en escarpado acantilado que miran al mar, tan escondidas y a la vez tan visibles; entre ellas la de Gorham, forman ya, parte de la lista de Patrimonio Mundial.
Gibraltar ha entrado en el selecto club de bienes elegidos por la Unesco, con sus cuevas de neandertales, que ha presentado Reino Unido.