Aunque pueda parecer muy emocionante decorar una casa, cuando se trata de hacerlo en pareja, pueden surgir diferencias porque no todos tenemos los mismos gustos y opiniones.

A todos nos llega el momento de independizarnos, irnos de casa de los padres para emprender una nueva vida con nuestra pareja en nuestra casa. Cuando una pareja decide empezar una vida en convivencia, aparece el momento importante que es la elección y decoración de su nuevo y primer hogar.

Ponerse de acuerdo

Hablen de acuerdo a lo que cada uno desea, le gusta e inspira y de cómo decoraría cada ambiente de la casa, de esa forma podrán darse cuenta de las diferencias que hay entre ambos o ¿por qué no?, lo puntos en común que tienen en lo que a decoración se refiere.

Si hay aspectos en los que no es posible negociar o entenderse, una buena opción puede ser que cada uno cree un espacio propio y personal dentro de la casa que pueda decorar a su gusto. O también puedes ceder en algo a cambio de que él ceda en otra cosa.

También es importante que determinen un presupuesto que van a dedicar a la decoración y amueblamiento.

Tips para decorar el hogar en pareja

Por regla general y cada vez de forma más frecuente, las parejas jóvenes empiezan viviendo en casas de reducidas dimensiones. Por ello se recomienda que la distribución y el diseño interior de cada habitación permitan que la luz circule por ellas, evitando cualquier elemento que impida esto.

Al elegir los colores para pintar la vivienda, hay que usar colores claros y limpios; no hay por qué olvidarse del blanco que es el color que más luz da a una habitación, en oposición a otros colores que dan oscuridad y empequeñecen las habitaciones.

El suelo a utilizar debe ser de tonos claros, ya sea en parqué, laminados, porcelámicos o incluso usar un suelo desconocido, pero de un carácter muy cálido y acogedor. Lo importante es que dé continuidad a las salas y sea capaz de admitir cualquier tipo de mueble.

Respecto a la iluminación, se pueden elegir los focos empotrables basculantes, que dan modernidad unido a alta luminosidad natural, con la ventaja de que no ocupan espacio físico y permiten, al ser direccionables, resaltar objetos decorativos que queramos destacar.

Para el mobiliario y decoración de las habitaciones y salón, deben predominar colores claros, abundancia de espejos que den profundidad, usando en alguna zona espejos envejecidos que dan estilo y exclusividad por lo inusuales que son. Por otro lado, hay que usar telas cálidas con tonos con los que la pareja se sienta a gusto y que perduren en el tiempo.

La cocina debe ser diseñada teniendo en cuenta que es uno de los lugares más asiduos que la vivienda tiene. Tiene que tener colores agradables y neutros como el blanco, gris o marrón. La luz debe tener una cuidada disposición para no generar sombras que molesten a la hora de cocinar. Los azulejos deben ser de colores claros, preferentemente blancos, colocando un cristal hidráulico delante de los azulejos en la zona alrededor de la encimera para evitar el deterioro de los mismos. Así mismo, debe haber vitrinas con tonos cobre, blanco o madera natural que dan luz y transparencia a la cocina.

A diferencia de la decoración en las áreas sociales, como la sala, el comedor o cocina, la ambientación del dormitorio puede ser totalmente distinta, en esta estancia se puede arriesgar a utilizar texturas o colores mucho más vivos. Todo depende del gusto de la pareja. Es cuestión de complementarse.

En definitiva, para una pareja joven su primera vivienda debe ser actual, con mucha luz, con colores alegres, mezclando lo clásico que siempre perdura, con lo moderno, característica de la pareja, buscando que ambos consideren esa casa su hogar.