El 21 de septiembre es el Día Mundial del alzhéimer. Todos los años, se realizan actividades en diferentes países, para concienciar y ayudar a prevenir la enfermedad mental.
El alzhéimer es un tipo de demencia que causa problemas con la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Los síntomas generalmente se desarrollan lentamente y empeoran con el tiempo, hasta que son tan graves, que interfieren con las tareas cotidianas.
La enfermedad de alzhéimer, es responsable de entre un 60 y un 80 por ciento de los casos de demencia.
El alzhéimer, no es una característica normal del envejecimiento. El factor de riesgo conocido más importante, es el aumento de la edad, y la mayoría de las personas con este mal, son mayores de 65 años. El alzhéimer, empeora con el tiempo, es una enfermedad progresiva, en la que los síntomas de demencia empeoran gradualmente, con el paso de los años.
En sus primeras etapas, la pérdida de memoria es leve, pero en la etapa final del alzhéimer, las personas pierden la capacidad de mantener una conversación, y responder al entorno.
Las personas con alzhéimer, viven un promedio de ocho años después de que los síntomas se vuelven evidentes, pero la supervivencia puede oscilar entre cuatro y 20 años, dependiendo de la edad, y otras afecciones de salud.
En 2015, los datos establecían que había en el mundo, más de 47 millones de personas aquejadas por esta enfermedad, actualmente esta cifra ha aumentado hasta los 50 millones.
El avance está siendo imparable, y se calcula que para 2050, la cifra podría triplicarse hasta sobrepasar los 150 millones.
En la actualidad, no existe ningún medicamento para curar la enfermedad de alzhéimer, por lo que la detección precoz, sigue siendo la clave para mitigar los daños antes de que sea irreversible. El problema radica, en que en su estado inicial, apenas presenta síntomas evidentes.
Los métodos que se utilizan para su detección, se llevan a cabo a través de unos test clásicos, que cuentan con gran cantidad de limitaciones. Tienen que ser realizados por profesionales del área de la salud, en un entorno muy controlado, lo que suele generar en el paciente, el conocido como ‘efecto de la bata blanca’. Estos tests se realizan con papel y lápiz, y no tienen mucho que ver con situaciones de la vida real, y suelen llevarse a cabo, cuando el deterioro está bastante avanzado.
INTELIGENCIA ARTIFICIAL (IA) PARA EL DIAGNÓSTICO TEMPRANO DEL ALZHÉIMER
Investigadores de la Unidad de Biomarcadores y Señalización Molecular del Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) en España, han iniciado un nuevo proyecto de investigación centrado en el diagnóstico precoz de la enfermedad de alzhéimer, mediante el empleo de técnicas de Inteligencia Artificial, sobre imágenes del fondo de ojo.
Concretamente, estos marcadores son acúmulos del péptido β-amiloide, uno de los principales marcadores fisiopatológicos de esta enfermedad, que aparecen en el cerebro, desde las fases más tempranas de la patología, y que diversos estudios han demostrado su presencia, del mismo modo, en la retina.
Gracias al uso de la IA, sobre los cúmulos de péptidos que se encuentran en la retina, se podrá predecir la aparición de la enfermedad, igual con 10 o incluso más años antes de que se muestren los primeros síntomas. Ese diagnóstico temprano, va a permitir abordar la enfermedad de forma más eficaz.
Gracias a esta tecnología, los médicos podrán desarrollar un sistema que se caracterice de forma automática, y reporte un potencial desarrollo de la enfermedad, a la par que se facilita su diagnóstico, podrán diagnosticar el alzhéimer precoz, incluso antes de que se produzcan los primeros síntomas.
Por otra parte, un equipo multidisciplinario formado por ingenieros de telecomunicaciones de la Universidad de Vigo, y un psicólogo de la Universidad de Santiago, están trabajando en un plan, que pretende superar las limitaciones de los test clásicos, e intentar detectar el daño cognitivo, antes de que sea demasiado tarde. Para ello, han desarrollado un proyecto pionero, sustentado en el uso de la inteligencia artificial (machine learning). Han bautizado el sistema como Panoramix, que consiste en una batería de sencillos juegos, para ser recreados en una tablet. A través del uso de la realidad virtual, se pueden simular escenarios de la vida cotidiana.
Panoramix está dividido en diferentes secciones orientadas a detectar el deterioro, de manera que cubra todo el espectro cognitivo; cada una de ellas está centrada en evaluar una parte: Episodix, la memoria episódica; Attentix, la atención; Workix, la memoria de trabajo; Sematix, la memoria semántica; Prospectix, la memoria de procedimiento y por último Gnoxis, que abarca las gnosias visuales.
Se han llevado a cabo varios proyectos piloto con personas mayores, y los resultados están siendo tan prometedores, que varias revistas científicas han decidido publicarlos, haciendo eco en los beneficios que este tipo de ‘juegos’ podrían tener, en el control del desarrollo de este tipo de enfermedades.