No producir residuos, es la nueva tendencia ecologista que va más allá del simple reciclaje.

Cada día, se tira cerca de un kilo y medio de basura por persona. Es decir, que cada año se produce más de media tonelada de desperdicios, que muchas veces acaba en grandes basureros, pudriéndose bajo el sol o contaminando mares y ríos.

El movimiento ‘Zero Waste’ o ‘Cero Residuos’ es una filosofía de vida, basado en reducir al mínimo la cantidad de residuos que generamos. Reduciendo la basura que se genera, se reduce también nuestra huella de carbono, que es nada más y nada menos que la totalidad de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto. Así, adoptar un estilo de vida ‘Zero Waste’ implica llevar un estilo de vida más sostenible, más respetuoso con el medio ambiente.

Pero, ¿y si pudiera llevar una vida produciendo cero residuos?

Una vida libre de bolsas, cajas de cartón y botes de plástico. Una vida libre de la sobreabundancia de envases y envoltorios que inevitablemente acaban en la papelera. De eso trata Zero Waste.

Algunas medidas simples que todos podemos aplicar son:

Reusar las botellas. El agua del grifo suele ser buena en los países desarrollados, y aun así se usan miles y miles de botellas de plástico diariamente.

Evitar las bolsas de plástico. Hoy en día, en muchos sitios, regalan maravillosas ‘tote bags’, seguro que tiene alguna en casa. Se pueden lavar, no ocupan nada y las puede usar tantas veces cómo quiera.

Reusar los envases de cristal.

Cambiar los kleneex de papel por uno de tela. Y en la cocina, los rollos de papel por trapos de ropa.

¡Evitar imprimir! ¿En esta época en la que todos tenemos móvil, hace falta imprimir los billetes de avión? ¿El ticket de ese concierto o la entrada de ese evento? Cuando vaya a hacer la compra y le digan si quiere el recibo: diga que no. En el banco, escoja la opción para que le envíen correos electrónicos en lugar de cartas.

Si tiene que comprar algo, escoja algo que sea orgánico. De producción respetuosa con el medio ambiente, y vegano.

Comprar de calidad, 1 vez. En lugar de comprar muchas cosas de poca calidad.

Ropa de segunda mano. Un 90% de la contaminación, ya ha ocurrido antes de que compre su producto.

Que su próximo cepillo de dientes sea de bambú. ¿Sabía que el plástico sólo se puede reciclar una vez? Tomando en cuenta que cada humano usa unos cuantos cepillos de dientes al año. ¿Cuánto se está contaminando? Una alternativa muy buena, es usar cepillos hechos de bambú.

Comprar a granel. Llevar botes de cristal de casa, botellas de plástico vacías y bolsas para comida.

Es por eso, que el lema de Zero Waste para tener una vida sin basura es:

"Negar, Reducir, Reusar, Reciclar y Pudrir".