El estudio de arquitectura dirigido por Martín Gómez Platero ha diseñado un monumento a gran escala para honrar a todas las personas que han sido afectadas por el COVID-19. Situado en Uruguay, el monumento ha sido concebido para manifestarse como una expresión de esperanza en los actuales tiempos de incertidumbre, pretendiendo ser un espacio de luto y reflexión con conciencia ambiental y emocionalmente impactante. Como primer monumento de gran envergadura dirigido a todas las víctimas de la pandemia del mundo, el proyecto ha sido llamado "Memorial Mundial de la Pandemia".
El monumento estará situado en el extremo de un largo paseo marítimo-urbano, al que sólo se podrá acceder de manera peatonal. En el centro de la plataforma, un vacío abierto al océano permitirá que la gente observe la naturaleza bajo sus pies. La gran estructura circular servirá como una "experiencia sensorial que tiende un puente entre el mundo urbano y el natural, creando un ambiente ideal para la introspección".
Martín Gómez Platero, señaló que " Al crear un monumento capaz de activar los sentidos y la memoria, podemos recordarle a cada visitante que nosotros, como seres humanos, estamos subordinados a la naturaleza y no al revés –como bien lo ha hecho la pandemia-".
El monumento podrá acoger hasta 300 visitantes a la vez (obedeciendo las directrices actuales de distanciamiento social), lo que permitirá que haya, además de instancias de reflexión individual, momentos de solidaridad compartidos. "Con cada proyecto que llevamos a cabo", continúa Gómez Platero, "buscamos crear un pedazo mejor de ciudad. El espacio público es el espacio común por excelencia: nos representa como colectivo, y refleja lo que somos capaces de compartir como sociedad".
El estudio señaló que ya se están entablando las conversaciones pertinentes con el gobierno de Uruguay para definir el sitio específico en el cual se implantará el monumento. Estiman que, una vez iniciado, el memorial tomará seis meses en completarse.