Ubicado a unos 200 km en el interior del Círculo Polar Ártico, en una pequeña aldea llamada Jukkasjärvi, el ya icónico ICEHotel, un proyecto artístico convertido en hotel, tiene ya más de 2 décadas.
Es una construcción que se derrite cada año, cuando las temperaturas comienzan a subir, y se reconstruye, cuando el clima lo permite. Se llama “Ice Hotel” y se encuentra en la estación eco turística de Suecia donde es posible realizar todo tipo de deportes y actividades de invierno, con lo que el tiempo libre siempre está ocupado.
En 1989 se construye el primer Hotel, un pequeño Iglú de 60 m2, que en realidad fue hecho para albergar una exposición de esculturas artísticas hechas de hielo y nieve. No obstante, la enorme afluencia que despierta el acontecimiento agota casi instantáneamente la capacidad de alojamiento existente en la aldea. Había que encontrar una solución... y resultó fácil. Se optó por alojar a los visitantes en el iglú junto con las obras de arte heladas.
Precisamente por haber sido concebido partiendo de la idea de una exhibición de arte de hielo, cada año un artista diferente realiza el diseño de este famoso y especial hotel.
Desde entonces miles de turistas la visitan en invierno, atraídos por el excepcional paisaje blanco y la experiencia de dormir en un hotel de hielo.
Para que la construcción de este hotel de hielo sea posible, se necesita disponer principalmente del hielo. El hielo es obtenido del río Torne que se congela todos los años, y que permanece cubierta por una capa de un metro de hielo durante la mayor parte del año. El agua es impecable y produce un cristal claro y transparente.
Las habitaciones están iluminadas por lámparas de aceite y débiles rayos de sol ártico. Los ruidos son casi inexistentes, ya que las gruesas y firmes paredes de nieve hacen que los sonidos se escuchen diferentes. El hotel ofrece un servicio de ayuda, como un curso y da consejos para poder dormir a tan bajas temperaturas. Las camas estan cubiertas por pieles y sacos polares de dormir.