El impuesto ISAI, es abonado por las personas que compran inmuebles dentro de la entidad, ya sean construcciones, terrenos, o construcciones y terrenos.
Cuando elige una casa se fija en la ubicación, las características físicas, la superficie de la vivienda y hasta en las amenidades con las que cuenta. Una vez definidas sus preferencias, le interesará conocer el precio de la propiedad, y calcular si le alcanza con lo que tiene ahorrado. Considere en esta etapa, que el proceso de compra incluye el pago de gravámenes, gastos notariales y el impuesto a la adquisición de inmuebles. Le explicamos más acerca de esta última obligación fiscal.
El Impuesto sobre Adquisición de Inmuebles (ISAI) es también conocido como Traslado de Dominio (su denominación varía según el Estado en el que se aplique) es aquél gravamen que paga el Notario directamente a la entidad a la que pertenece el inmueble. Es un impuesto estatal, ya que el gobierno de cada entidad es el que determina la tasa a pagar. Este gravamen se calcula en función del valor catastral de la propiedad y las condiciones del mercado en la localidad donde se ubica. Por lo regular, se establece una tasa fija del 2% sobre el valor de inmueble, pero en algunos estados puede variar.
¿Cómo y cuándo se paga?
En esta transacción los interesados firmarán el contrato de compra-venta, y el notario realizará la escrituración e inscripción del bien, en el Registro Público de la Propiedad, a nombre del nuevo dueño. El impuesto de adquisición se debe cubrir en el momento en que se formaliza la venta, debido a que es un requisito para trasladar el dominio al nuevo propietario.
Excepciones de pago
Como se trata de impuestos estatales, las exenciones o excepciones para el pago de este impuesto, dependen del estado en que se esté adquiriendo el bien inmueble. En algunas entidades, las exenciones del pago de este gravamen aplican, para organizaciones de beneficencia o asistencia, e instituciones públicas o privadas de enseñanza reconocidas oficialmente. Y en otros estados este impuesto no aplica cuando se adquiere una propiedad por donación, o por causa de muerte.
Si está pensando en adquirir una casa, departamento o terreno, considere el pago de este impuesto, dentro del presupuesto destinado a su compra.