Un sistema de captación de agua en su vivienda podría proporcionar a su familia entre 5 y 8 meses de independencia en agua.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), actualmente el 55% de la población mundial vive en ciudades, y se estima que éstas seguirán creciendo a ritmos acelerados, sobre todo en los países en desarrollo.
Dichas ciudades suelen enfrentarse a una escasez de servicios públicos, que puede agravarse en los próximos años; especialmente en lo que respecta al acceso y abastecimiento de agua. Situación que, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ya afecta a 38 ciudades mexicanas.
Por esta razón, ahora más que nunca resulta esencial que cuidemos este líquido vital, y una muy buena alternativa para ello son los sistemas de captación pluvial, que, como su nombre lo indica, le permitirán cosechar y almacenar el agua de lluvia para que pueda aprovecharse en distintas actividades en su hogar.
La captación pluvial es una práctica que ya se realizaba desde la antigüedad, pero, con el paso del tiempo, se han ido implementando nuevas tecnologías para que la recolección y reutilización sea más eficiente y segura.
¿CÓMO FUNCIONAN?
Estos sistemas cuentan con diferentes componentes para captar el agua de lluvia y dejarla lista para usarse en el hogar:
·Módulo de recolección: que generalmente son canaletas colocadas alrededor de la vivienda para recaudar el agua que cae.
·Módulo de conducción: que consta de una tubería que ayuda a que el agua se pueda trasladar de las canaletas al lugar donde se va a almacenar.
·Sistema de filtración: para eliminar todos los contaminantes que pueda tener el agua.
·Módulo de almacenamiento: que pueden ser tanques o tinacos de diferentes capacidades, dependiendo de las necesidades de los usuarios.
·Módulo de distribución: que es un sistema hidráulico por el cual se transportará el agua hasta las válvulas de salida, para poderla destinar para los diferentes usos de la casa.
¿CUÁLES SON SUS VENTAJAS?
La principal ventaja de estos sistemas es que permiten un mejor aprovechamiento del agua que se precipita de forma natural, al transformarla en agua limpia para diversos usos en la vivienda.
Además, en 1 metro cuadrado (m²) de techo se pueden captar hasta 700 litros de agua al año; con lo que se podría proporcionar a su familia entre 5 y 8 meses de independencia de la red de suministro de agua local.
De igual manera, estos sistemas no requieren de una gran infraestructura o una fuerte inversión de dinero; y, con el paso del tiempo notará un ahorro significativo en la economía familiar.