La Casa Azul, es la casa donde nació, vivió, y murió la célebre artista mexicana Frida Kahlo
Casa Estudio de Diego Rivera y Frida Kahlo
Esta casa es uno de los hitos culturales más importantes de la Ciudad de México, tanto por haber sido el sitio de residencia y trabajo, de dos de los artistas plásticos más importantes del siglo XX, así como por ser la primera construcción del movimiento moderno realizada en el continente americano. La obra causó una fuerte polémica en la década de los años 30, al combinar la arquitectura orgánica mexicana y el muralismo arquitectónico, con el funcionalismo. Representó la rotura de todos los paradigmas estéticos en la arquitectura mexicana hasta ese entonces, al incorporar de manera contundente las teorías y pensamientos más vanguardistas que arquitectos como Le Corbusier, estaban desarrollando en el continente europeo. Pensamientos como el uso racional de los materiales, el análisis del funcionamiento ideal de los espacios, y la adecuación de los mismos a las actividades que se realizaban dentro de ellos, ideas que en un principio resultaron radicales, pero con el tiempo fueron asimiladas por la arquitectura a nivel mundial. Estas casas fueron realizadas con el mínimo posible de gastos y trabajo.
El arquitecto y pintor mexicano Juan O’Gorman, amigo personal de Diego Rivera, se encargó del proyecto. La historia de la casa-estudio, comienza cuando O’Gorman adquiere dos parcelas. Al mostrarle el lugar a Rivera, el arquitecto ofreció vendérselo al mismo precio que lo había adquirido si le encargaba la construcción de su casa y estudio. Diego Rivera aceptó, y además le encomendó una casa para su mujer, Frida Kahlo. El muralista permaneció en esa casa, hasta el día de su muerte, el 24 de noviembre de 1957. Posterior al deceso, las dos casas fueron heredadas a su hija, Ruth Rivera Marín, quien las donó al Instituto Nacional de Bellas Artes.
Las dos viviendas se encuentran en la misma parcela, en la esquina de Palmas y AltaVista, de la Delegación Álvaro Obregón, en la tradicional Colonia San Angel de la Ciudad de México. Se diferencian completamente del resto del barrio, y solo se identifican con el ambiente natural y el construido a través de los colores y de los cactus que rodean la construcción y la relacionan con el entorno. O´Gorman, heredero de la escuela holandesa de arquitectura y de Le Corbusier, diseñó esta casa, especialmente para la pareja, que constituye uno de los primeros ejemplos de arquitectura funcionalista.
Tomando las ideas fundamentales basadas en Le Corbusier sobre la máquina de vivir, sus 5 puntos propuestos, y recapacitando sobre las condiciones vividas en México, resolvió los problemas de vivienda con el mínimo coste. Creó así una casa conformada por dos bloques de concreto liso, independientes uno del otro, y comunicados por un puente angosto que une las azoteas. Un bloque es rojo y representa a Diego. El otro es azul, representando a Frida. El puente que los une, es el lazo de pasión entre ellos. También cumple con los 5 puntos de Le Corbusier, antes mencionados, con la casa sobre pilotes, plantas libres, fachadas libres, terraza jardín y ventanas alargadas.
La obra muestra su esqueleto de acero, tuberías, escaleras y sus materiales económicos. A su vez, es una casa mexicana con sus colores fuertes, texturas de pisos y su cerco de cactus. Es una fábrica, una máquina de vivir, la máquina de arte donde Frida y Diego producían un mundo estético nutrido de México, su historia, su gente, sus problemas y sus sueños.
Casa Azul
Frida Kahlo nació en la ciudad de México, un 6 de julio de 1907, siendo la tercera de cuatro hijas. Sus padres Carl Wilhen Kalho de nacimiento alemán y su madre Matilde Calderón, oaxaqueña, construyeron la Casa Azul, en el año de 1904.
La Casa Azul, siempre ha sido y seguirá siendo azul, así la concibió su padre, es una casa de un nivel económico alto pero sencillo, posee dos niveles el sótano y la planta de calle, el patio central es la base de su diseño, cuenta con salas, una gran cocina, un amplio estudio de trabajo de Frida Kahlo, una pequeña recámara de día y una recámara de noche, también por separado una recámara para Diego Rivera, el tratamiento interior al exterior, es distinto, por fuera es una casa tradicional con secciones planas y molduras y por dentro sobre todo el estudio y recámaras presentan signos de Modernismo.
Al igual que la casa de Rivera, la planta baja de la casa de Frida es un espacio abierto entre pilotes que sirven de sostén para las plantas superiores. En esta planta se encuentran las zonas de servicio y una escalera semicircular que lleva al primer piso. En la primera planta a la izquierda se ubica la pequeña cocina, en el resto, el comedor y la sala de estar. La escalera continúa hasta la segunda planta, en la cual la mitad oriental está destinada al estudio de la pintora, la otra mitad está ocupada por un pequeño vestíbulo que da acceso a la escalera que conduce a la terraza y al pequeño dormitorio de Frida, con una ventana que mira al sur.
Las estructuras de ambas casas son independientes, de hormigón armado. Siguiendo las características que marcan la teoría arquitectónica funcionalista de O’Gorman, ‘gasto mínimo y esfuerzo, máxima utilidad’, la construcción se basó en el uso del hormigón armado, adaptando el diseño a la función.