La cycas revoluta suele ser muy decorativo por su aspecto exótico y por su elegante follaje pinnado y alargado de color verde oscuro; la cual se parece a una palmera, pero realmente no lo es.

También conocida como Cica, Palma de Sagú, Cyca revoluta y Sagú del Japón. La cycas revoluta es considerada como una especie rara y primitiva, originaria de Japón. Son plantas ornamentales muy bellas que ya vivían en la tierra hace 300 millones de años. Por su forma o apariencia pueden parecerse a una palmera, pero son plantas que no están emparentadas. Crece en climas tropicales y subtropicales.

La cycas revoluta presenta un tronco robusto, cilíndrico, generalmente corto y sin ramificar, con un aspecto muy característico al quedar cubierto por las bases foliares. Tiene un crecimiento lentísimo, ya que los ejemplares grandes de más de 25 años sólo alcanzan metro y medio de altura. Aun así, no suelen alcanzar más de 3 metros de altura.

Las hojas que coronan el tronco en forma de roseta son pinnadas, brillantes y de un verde muy oscuro. Estas hojas pueden llegar a medir más de 1 metro de largo. La cycas revoluta tiene flores, sólo que no son muy llamativas y tienen una estructura parecida a la de las coníferas.  La cycas revoluta es una planta dioica, que tiene las flores masculinas y las flores femeninas en pies separados. Las palmeras masculinas desarrollan conos poliníferos, y las palmeras hembra tienen conos donde almacenan las semillas.

La germinación de la cycas revoluta es muy lenta, y se puede alargar de 6 meses a 1 año. Además hay que someter a las semillas a un proceso de reblandecimiento llamado estratificación. Es el mismo proceso que se realiza para todas las semillas que tienen la cubierta dura y resistente. Hay otra opción de reproducción de la cycas revoluta que consiste en obtener nuevos ejemplares a partir de los retoños que aparecen en la base y a lo largo del tronco. Estos se sacan en primavera con cuidado y se plantan dentro de un recipiente pequeño con una mezcla de tierra  y arena.

Los cuidados

Debes quitar sólo las hojas inferiores ya secas. Esto debe hacerse lo más cerca del tronco principal y con una sierra o serrucho bien afilados. Recuerda, solo quitar las hojas secas de las coronas inferiores. Aunque las hojas verdes estén algo deterioradas no deben podarse. En el caso de tener que cortar hojas verdes, eliminaremos sólo una corona de hojas. Es conveniente quitar algunas hojas verdes si tienen signos evidentes de ataques de hongos; evitaremos que se propaguen por el resto de la planta. Para evitar este tipo de enfermedades realizaremos aplicaciones de fungicidas trimestralmente.

Riego

Si crece en maceta, hay que esperar hasta que la tierra este casi seca antes de regar. Si la planta recibe sol durante el día, aunque sea parcialmente, y las temperaturas son suaves, necesitará que la reguemos al menos una vez por semana.

Abonado

Se aplica en la primavera o a fines del verano. Es preferible aplicar poco fertilizante que hacerlo en exceso. En caso de utilizar un fertilizante orgánico o de liberación lenta, evitar la aplicación del mismo sobre la corona, donde se alistan las hojas nuevas para salir.

Las plagas

La más frecuente que puede aparecer en esta palmera son las cochinillas, localizadas en el envés de la hoja. Pueden ser de varios tipos: cochinillas de la tizne, cochinillas chatas y caspillas.