Es el mayor lago glaciar de Islandia y uno de los más bellos paisajes del planeta.
El lago Jökulsárlón se encuentra en el sureste de Islandia, en los límites del Parque Nacional de Vatnajökull. Cuenta con una profundidad de aproximadamente 200 metros, y una superficie de unos dieciocho kilómetros cuadrados.
El lago Jökulsárlón está separado del mar, por tan solo un kilómetro y medio, por lo que es habitual poder avistar focas nadando en la laguna o descansando sobre los icebergs, así como aves marinas, especialmente charranes árticos y skuas que anidan en los alrededores del lago, pues en la zona proliferan los bancos de arenques.
Lo que hace famoso y curioso al Jökulsárlón, es su espejo de agua saturado de icebergs de hermosas formas y colores, provenientes del gran glaciar Breiðamerkurjökull, un espectáculo cambiante a cada momento por los movimientos de los gigantes de hielo, pudiendo ser contemplados a escasa distancia.
En la desembocadura del lago, se encuentra una playa de negrísima arena volcánica, que contrasta y resalta con los blancos bloques de hielo procedentes del lago, antes de disgregarse finalmente en el mar, componiendo de este modo un paisaje único, maravilloso y sobrecogedor.