Las manijas son una muy buena opción para darle un aire diferente a tus muebles, y es que en función de una manija escogida podemos lograr que un mueble parezca más rústico, más moderno o más clásico.
Si queremos cambiar un poco el estilo del salón, por ejemplo, y no queremos comprar nuevos muebles puedes intentar por cambiar las manijas de los muebles y elegir unos que le den un estilo diferente.
Incluso si compras un mueble nuevo y no te acaban de convencer las manijas que tienen, puedes encontrar unas que se adapten más a tus gustos. En el mercado puedes encontrar manijas de diferentes diseños y materiales, como cristal, porcelana, metal o plástico; las cuales puedes adaptar según el estilo que estés manejando en tu hogar o el espacio que deseas decorar.
Para escoger las manijas adecuadas ten en cuenta algunos puntos; el diseño de los gabinetes, así como el color del material tendrán un papel importante en la elección de las manijas. Por ejemplo, si has seleccionado puertas sin marco de madera oscura, es posible que desees seleccionar una manija contemporáneo de cromo.
Ir por la calidad. Recuerda que las manijas experimentarán el uso diario y por lo tanto tienen que estar hechas de materiales de primera calidad. Mientras que el metal de bajo costo o las opciones de plástico pueden parecer una buena manera de reducir los costos, esto también puede conducir a futuras reparaciones o reemplazos. Además, sino son lo suficientemente resistentes, puede contribuir a un mayor desgaste y el rasgón en los propios gabinetes.
Hay tantos diseños únicos para elegir que siempre encontrarás una opción que coincida con tu gusto personal, pues hay manijas en casi todas las formas imaginables, como de garabatos y remolinos a rosetones delicados y ultra detalladas cerámicas pintadas.
Así es como hay que poner detalle hasta en el último elemento, no sólo en lo que estamos acostumbrados, sino también, en los elementos que nos facilitan el día a día, y que se encargan de vestir nuestro hogar.