Siendo campeona olímpica, mundial, panamericana y centroamericana; podría despedirse en Tokio 2020.
México tiene en su historia una larga lista de deportistas que han dejado huella en cada una de sus disciplinas, pero si hay alguien que llegó a la cima y conquistó el tatami, esa es María del Rosario Espinoza. Nacida en Sinaloa, esta deportista compite en Tae Kwon Do, y es campeona olìmpica de Pekín 2008. Originaria del municipio de Guasave, Sinaloa, creció dentro de una familia de pescadores, pero nada fue un impedimento para que dejara atrás las carencias, y consiguiera la meta y el sueño de convertirse en una gran deportista mexicana.
Desde los 8 años incursionó en el Tae Kwon Do, aunque al inicio le resultó un poco difícil, ya que tuvo que cubrir diferentes gastos como: renta, pagar exámenes, equipo de entrenamiento, viajes, competencias, entre otros. Su primer patrocinador fue su familia, la cual nunca dejó de brindarle su apoyo.
Actualmente, María del Rosario cuenta con todas las medallas que puede ofrecerle su deporte: es campeona olímpica, mundial, panamericana y centroamericana. María no dejó de brillar, y tras las preseas de bronce y plata, en Londres 2012 y Brasil 2014, se convirtió en la primera atleta tricolor en subirse al podio en tres ediciones de los Juegos Olímpicos.
En su trayectoria destacan dos medallas en Juegos Panamericanos, y cinco en Juegos Centroamericanos y del Caribe, dos de ellas áureas.
Con 31 años de edad, Rosario Espinoza se plantea su último ciclo rumbo a Tokyo 2020, en el que espera despedirse con una gloria más en su carrera y dejar su nombre plasmado en la historia del Tae Kwon Do mundial.