La elección del tipo de acabado que utilizaremos dependerá del uso que le vayamos a dar al espacio y el efecto que queremos lograr.
Ya has elegido el color de la pintura para tu casa, pero ahora queda la decisión final: ¿qué acabado elegir? Gran dilema para muchos.
Cuando se habla de acabado en una pintura se refiere a la terminación que ésta tendrá. Dentro de estos acabados existen diferentes terminaciones, una de estas es la terminación mate.
Este tipo de acabado normalmente se utiliza para techos y paredes de habitaciones con poco movimiento. Esto se debe a que las pinturas mate, al no tener nada de brillo, son porosas y no reflejan bien la luz. Asimismo, no van con superficies que se deban limpiar.
Ventajas del acabado mate
• La primera ventaja que podemos ver en estos productos es que actualmente es la terminación preferida de los diseñadores y arquitectos. Además, este acabado disimula las pequeñas imperfecciones que puedan tener las paredes. Es muy común su uso en interiores y exteriores.
• Al tener una terminación opaca, la pared se transforma en un complemento y no en el protagonista de la decoración. Por lo tanto, este tipo de terminación es ideal cuando se busca resaltar algún objeto en la pared.
• Su aplicación es mucho más sencilla que la de las pinturas satinadas o brillantes. Si se aplica con las herramientas tradicionales, disimula las marcas de pinceladas y la textura del rodillo, logrando una superficie tersa, sin rayones o marcas visibles.
Desventajas del acabado mate
• El acabado mate se mancha fácilmente con el roce, lo que es sugerible no usarlo en lugares muy transitados. Sin embargo, existen productos que incorporan la tecnología de partículas inteligentes, que permite una limpieza total de las manchas tan solo con frotar un paño húmedo sobre la superficie.