Más barata que el oro, la plata suele ser la gran olvidada por los inversores cuando acuden a la seguridad que dan los metales preciosos.

En tiempos de incertidumbre económica los valores más seguros siempre son las materias primas. El mercado de inversión en este tipo de activos lleva años incrementándose, y cada vez son más los que apuestan por fiar su dinero a la estabilidad, lejos de productos volátiles e inestables.

Últimamente, la plata se ha erigido como un material seguro para invertir, y en torno a ella se erigido un mercado al que acuden un número creciente de inversores. Este metal precioso se considera un activo muy seguro, similar a su metal hermano, el oro. Ambos son capaces de proteger a los inversores, y pueden ser una buena opción para aquellos que buscan estabilidad en tiempos difíciles.

UN VALOR SEGURO 
 
Cuando la economía se vuelve turbulenta y los mercados de valores oscilan, los inversores suelen acudir en masa a la seguridad de los metales preciosos. Cuando abunda la incertidumbre política y económica, la moneda de curso legal generalmente pasa a un segundo plano frente a activos como el oro y la plata.

Si bien los lingotes de oro y plata pueden ser atractivos para los inversores, el metal blanco suele quedar en un segundo plano frente al oro, aunque desempeña el mismo papel.

Otra de las ventajas que ofrecen estos metales es que son dinero tangible. Mientras que las acciones, los bonos y otros productos financieros son formas aceptadas de dinero, en esencia siguen siendo pagarés digitales, por esa razón, todos son vulnerables a la depreciación cuando los gobiernos intervienen, por ejemplo, imprimiendo dinero.

Por su parte, el oro, la plata, y otros metales valiosos son un activo tangible finito. Eso significa que, aunque son susceptibles a las fluctuaciones del mercado, es muy poco probable que se hundan, debido a su valor inherente y real. La plata es más barata que el oro. Entre lingotes de oro y lingotes de plata, el metal blanco no solo es menos costoso y, por lo tanto, más accesible para comprar, sino que también es más versátil a la hora de gastarlo.

Si un inversor está buscando comprar plata para usarla como moneda, será mucho más fácil de cambiar que un trozo de oro, ya que tiene un valor más bajo. Así como un billete de 1000 pesos puede ser difícil de cambiar en cualquier tienda, un lingote de oro puede ser mucho más difícil de cambiar que uno de plata. Así, el lingote de plata es mucho más práctico y versátil que el oro físico, lo que hace que la inversión en plata sea más atractiva.

INCONVENIENTES 

Como todo, invertir en plata también tiene algunos inconvenientes. El más destacado es la falta de liquidez inmediata. Existe la posibilidad de que, si un inversor tiene plata física, tarde en convertirla en dinero de curso legal.

Para hacer compras comunes, como ir al supermercado, no se pueden usar lingotes de plata o una moneda de plata, por lo que primero hay que convertir el metal en moneda, y venderlo rápidamente puede ser un problema. Si está en un apuro, las casas de empeño y las joyerías son una opción para cambiar plata por dinero, pero ni mucho menos es la mejor pagada.

Por último, otro de los grandes inconvenientes de invertir en plata es el riesgo de robo. A diferencia de la mayoría de los productos de inversión, como las acciones, guardar lingotes de plata puede hacer que los inversores sean vulnerables al robo.

Proteger los activos mediante el uso de una caja de seguridad en un banco, o una caja fuerte en casa supone gastos adicionales. Además, cuantos más activos físicos, incluidas las joyas de plata, tengas en casa, mayor será el riesgo de sufrir un robo.