La casa Rajuela surge de la necesidad de una persona de la tercera edad que vivía en una casa contemporánea de muy buena manufactura, pero que al mismo tiempo implicaba mucho mantenimiento por el elevado número de cristales, dobles alturas y el uso excesivo del color blanco, creando un ambiente tan “moderno” que le resultaba intocable, frío y un poco cansado de habitar.
Ella habita esta casa algún tiempo, pero con la llegada de los nietos comienza a tener excesivos cuidados y dificultades para mantener la casa con la limpieza y el orden necesarios para verse bien.
Algo cansada de estos cuidados que la “modernidad” le exigía, recurre a nosotros para pedirnos que en el gran jardín de aquella casa hiciéramos una casa más pequeña; se separó en dos terrenos para vender aquella casa que le estaba resultando ya algo pesada de mantener. El encargo entonces se reduce a un terreno que tiene 25 m x 35 m, siendo éste polígono el fondo del gran jardín de la casa previa.
El esquema surge de la idea de crear una casa muy fácil de vivir, utilizando materiales que no requirieran mantenimiento, de una escala mucho más amigable y acogedora para una persona de la tercera edad y con espacios exteriores que no requirieran de tanto mantenimiento ni cuidado, sino que fueran de un ambiente mucho mas tropical, sustituyendo aquel “garden” perfecto que ella tenía en su casa anterior.
De esta manera surge un esquema lineal que nos permite ubicar todos los espacios mirando hacia el norte para optimizar una luz pareja del sol y una buena ventilación (dado que los vientos dominantes de nuestra región vienen del noreste y sureste). Todos los espacios de la casa surgen a partir de un modulo de 4.50 metros.
El acceso a la Casa se da a través de una serie de muros traslapados que te dirigen hacia el recibidor. Una de las peticiones de la dueña era que el recibidor estuviera de alguna manera delimitado permitiéndole recibir a personas del trabajo sin que estas tuvieran que acceder del todo a la casa. Continuando el recorrido, a través del recibidor, accedemos a una doble altura que contiene el estar, el comer y el cocinar (la cocina separada de la sala-comedor por un muro bajo de granito negro), creando así un gran espacio que continúa en la terraza techada, ya con una escala más humanizada y se prolonga hasta el jardín, siendo ésta como una extensión del interior. Generando un espacio integrado e iluminado, y a la vez protegido del sol.
A continuación, de este espacio, se encuentran las recámaras, que también miran al norte; sin descuidar el módulo. Todo esto se integra a través de una circulación lineal que remata en una escultura. Los servicios se ubican en la planta alta.
La materialidad de la casa es sumamente sencilla. Está compuesta por piedra en varias de sus versiones, en los muros se recubre de una piedra que se toma de la tradición de Yucatán llamada rajuela, que consiste en forrar los muros con pedazos de piedra muy pequeños generando una textura, que a pesar de estar conformada por pedazos de piedra filosos, es de apariencia suave y sumamente interesante por el juego de sombras que tiene. Los pisos también son de piedra en una versión más pulida o mate y el resto de la casa es un envolvente blanco donde las maderas y los granitos son los elementos de contraste.
El objetivo general era que buy zithromax online esta Señora, a la cual queremos mucho en la oficina, tuviera una vida mucho más relajada, rodeada de sus nietos, sin preocuparse del cuidado de la casa. Logrando que los chavos pudieran sentirse en confianza sabiendo que en casa de la abuela podían divertirse haciendo en ella actos de uso rudo como son los propios de un niño.
PROYECTO: Casa Rajuela
ARQUITECTO / DESPACHO: Muñoz Arquitectos Asociados S.C.P. Arq. Javier Muñoz Menéndez
COLABORADORES: Arq. Gareth Lowe Negrón, Arq. Andrea Dutton Ruiz, Arq. Isabela Rincon Milet, Arq. Luis Miguel Acuña Gonzalez.
UBICACIÓN: Mérida, Yucatán.
CONSTRUCCIÓN: Construcción: 592.61 m2 Terreno: 1,001.24 m2
AÑO DE REALIZACIÓN: 2010
CONSTRUCCIÓN: ESTRUKTUM, Ing. Alejandro Esquivel Mimenza
ILUMINACIÓN: Luminica Iluminación
FOTOGRAFÍA: Rolando Córdoba