Cuando vamos a elegir una pérgola para nuestro jardín, su resistencia es uno de los factores más importantes a tener en cuenta.
En un principio las pérgolas sólo eran fabricadas en madera, su aspecto natural y su duración eran dos cualidades muy valiosas. Pero con la modernización y las nuevas tendencias, el aluminio poco a poco fué tomando posición presentándose como un material más ligero e igual de resistente.
Estas pérgolas de aluminio son el aditamento ideal para terrazas, patios y jardines, siendo una solución de protección y decoración muy versátil y funcional. Con la capacidad de proteger y cubrir grandes espacios exteriores.
Están compuestas por estructuras de aluminio con cubiertas de lona, policarbonato, vidrio, madera, caña o chapa. Los laterales suelen estar abiertos y muchas veces se recurren a telas o plásticos para cubrirse del viento y otros factores climáticos.
Relajación
Las pérgolas de aluminio te ayudarán a encontrar una buena relajación en el exterior de tu hogar ya que gracias a su resistencia podrás disfrutar de tu jardín independientemente del clima que exista en ese momento, porque tanto con lluvia, viento o sol podrás estar en tu terraza disfrutando de ella tanto si quieres hacerlo solo o en compañía.
Además éstas pérgolas de aluminio las podrás instalar en cualquier estación del año porque no se deteriorarán aunque el clima sea adverso, porque su resistencia puede hacer frente a cualquier clima.
Ligeras
Aunque tenga una apariencia pesada y gruesa la realidad es que las pérgolas de aluminio son características por su ligereza, además son prácticas porque son fáciles de manipular sean cuales sean sus características.
Estilo único
Además con las pérgolas de aluminio encontrarás un estilo único y moderno que te ayudará a encontrar una decoración minimalista para tu jardín o terraza, algo que sin duda le aportará un toque único. Así que junto con la decoración de tu jardín no dudes en incluir la práctica pérgola, y además elementos para un jardín minimalista.
Fácil mantenimiento
Las pérgolas estarán expuestas al sol, a las lluvias y al viento en todo momento. Gracias a que el aluminio es un material que no sufre daños al estar en contacto con el agua y que tampoco se ve afectado por los rayos UV, las pérgolas confeccionadas en este material requieren un trabajo de mantenimiento mínimo. A diferencia de la madera que necesita ser pintada, lijada y reforzada en cada temporada para que pueda verse bien, las pérgolas de aluminio mantienen un color intenso y brillante por mucho tiempo sin necesidad de esfuerzo.