Eran las 3:17 de la tarde del 20 de julio de 1969 en Houston, Texas, cuando por primera vez una nave de origen terrestre se posaba sobre la superficie lunar. El módulo, conocido por el nombre de Eagle y que formaba parte de la misión Apollo 11, llevaba consigo al piloto Buzz Aldrin junto con el comandante de la misión, el ingeniero aeroespacial Neil Armstrong, que se convertiría ese día en el primer hombre en pisar la luna.
La misión, la cuarta de la serie de vuelos tripulados Apolo, inicia la exploración humana de la Luna. Los astronautas recorren el terreno por más de dos horas recogiendo 22 kilogramos de muestras de suelo y rocas lunares e instalando instrumental científico para detección de sismos, partículas solares y un reflector láser. Plantan, además, una bandera norteamericana y una placa que dice:
‘Aquí llegaron a la luna hombres del planeta Tierra. Julio 1969 D.C. Venimos en paz en nombre de toda la humanidad’.
El hecho revistió gran importancia histórica no sólo por lo que significó este logro, sino por haber sido retransmitido por televisión pública a partir de la señal recibida por la estación de seguimiento Honeysuckle Creek, en Camberra, Australia. En esa transmisión y frente a la mirada perpleja de millones de personas que seguían el paseo lunar, Armstrong expresó con emoción la conocida frase: ‘es un pequeño paso para un hombre, pero un gran salto para la humanidad’.
El alunizaje
La hazaña se inició a las 10:32 a.m. en Caño Cañaveral a bordo del cohete Saturno V, vehículo que llevaría a bordo a Buzz Aldrin, Michael Collins y Neil Armstrong a la órbita lunar tres días después, y posteriormente a posarse sobre la superficie del satélite.
Seis horas y media después, el primer hombre en la luna descendería del módulo, percatándose de la seguridad de la operación. Acompañado por Aldrin, se dedicaría durante su estancia allí a instalar aparatos de medición, una cámara de televisión sobre un trípode para documentarlo todo y un detector de partículas nucleares emitidas por el sol. La misión de 8 días de duración concluye con el regreso de los astronautas a la Tierra.
Después de protagonizar este suceso, Armstrong asumió el cargo de vice-administrador asociado para la división de Aeronáutica. El 7 de agosto de 2012 en una cirugía de corazón abierto, falleció a la edad de 82 años.