El remate hipotecario es una excelente oportunidad para comprar una casa o terreno, gracias a los atractivos precios.
Los remates hipotecarios parecieran una opción atractiva para comprar casa, sin embargo, necesita conocer muy bien los pros y los contras, las características, así como el proceso de estos para ganar, y evitar no perder.
Un remate inmobiliario, es un proceso jurídico, en el cual se ordena el remate de un bien raíz, debido a que su propietario fue demandado por dejar de pagar la hipoteca bancaria, para que la institución financiera pueda recuperar parte de la inversión o del crédito que no pudo recuperar de manera regular con un cliente.
Un atractivo que tienen estos inmuebles en remate, es que su valor de venta es mucho menor al que pudieran tener en el mercado, a veces de un 30% a 50%, por lo que son muy atractivos para personas inversionistas que los adquieren y posteriormente los venden a su valor comercial real, obteniendo una buena utilidad. En otras ocasiones, son personas que desean vivir o usar un inmueble que está al alcance de su bolsillo, ya que el precio del inmueble se fija a través de un avalúo judicial que por lo regular es mucho más bajo que su valor en el mercado (en ocasiones abajo del valor catastral).
Al mismo tiempo debe de considerar ciertos gastos como:
• Adeudos de servicios como agua, luz y gas.
• Adeudos de predial.
• El valor de la propiedad: ¿cuánto cuesta el inmueble fuera del remate? Es importante conocer este dato, así como los costos de la zona en la que se encuentra, pues de esta manera sabrá el aumento de valor que puede tener, por si en un futuro decide venderlo.
• Escrituración: es obligatorio escriturar la casa a su nombre, este trámite tiene un costo que representa entre un 6% hasta 15% del valor catastral del inmueble (empleado para designar una serie de registros que muestran la extensión, el valor y la propiedad).
• Honorarios: el pago al abogado por sus servicios. No escatime, ya que un buen asesor legal le salvará de futuros problemas.