Una de las situaciones más complicadas de la vida es el desempleo y por eso, tu Afore te apoya a salir de esos baches en los que puedes encontrarte de forma involuntaria.

Lo que necesitas es acudir a tu Afore y solicitar tus recursos. ¿Sabías que por desempleo puedes obtener entre 30 y 90 días de tu último salario base de cotización?

Para hacer esta solicitud debes tener los últimos 2 estados de cuenta de tu Afore, lo cual en la mayoría de los casos es muy sencillo ya que dichos estados de cuenta llegan directamente al domicilio del ahorrador.

Si no tienes tus estados de cuenta debes ponerte en contacto con la empresa encargada de administrar tu ahorro para que te los proporcione, normalmente te van a pedir una identificación oficial, comprobante de domicilio (original y copia ambos) y el número de seguridad social para realizar el trámite.

Obtener tu Certificación de baja del trabajador desempleado que te darán en tu Subdelegación Administrativa del IMSS que te corresponda acorde a tu domicilio a partir del día 46 de desempleo.

Cuando ya tengas tu certificado de baja, debes esperar aproximadamente 5 días hábiles y acudir a la institución encargada de administrar tu AFORE para realizar la solicitud de transferencia de recursos.

Lo que sigue depende mucho de dónde tengas tu AFORE, sin embargo, en la mayoría de los casos te pedirán esperar de 3 a 10 días hábiles para poder disponer de tu dinero, de igual manera el método para hacerlo depende directamente de la institución.

Aquí es importante tomar en cuenta que al disponer de estos recursos, sí se te descontarán semanas de cotización. Sin embargo, si lo tomas como el uso de un ahorro en caso de emergencias y cuando tienes empleo, haces aportaciones voluntarias, dentro de la subcuenta de retiro, recuperarás las semanas y el dinero para tu retiro.

También es bueno saber, que ésta ayuda sí se puede utilizar más de una vez en la vida, sólo deben pasar al menos 5 años entre una solicitud y la siguiente.

El ahorro para el retiro es una garantía de tranquilidad en el futuro y en el presente, ¡aprovéchalo!.