Cuando llegan las vacaciones y no hay amigos, familiares o vecinos a quienes encomendar la tarea de regar las plantas, son muchas las personas que se plantean el siguiente interrogante: ¿qué hacer con ellas? En estas ocasiones, hay que agudizar el ingenio e idear tácticas para que las plantas conserven su humedad y se mantengan vivas mientras se permanece fuera de casa. Hidrojardineras, riego por goteo, automático o por imbibición; desde los métodos más sencillos a los más sofisticados, solo hay que elegir el que mejor se adapte a cada caso.
Aquí tienes nuestros trucos para que las vacaciones rimen con plantas y buena salud.
- Llena la bañera unos centímetros con agua y coloca varias toallas de rizo. Ahora sólo te falta poner tus plantas sobre ese suelo húmedo: beberán a su ritmo sin ahogarse. Sólo fíjate en que las raíces no queden bañadas por el agua, ya que sería fatídico.
- Otra solución es meter el cabo de una cuerda de algodón en un cubo de agua y dejar la otra punta en la tierra de las macetas. La cuerda empapará la tierra si el cubo está colocado por encima de las plantas.
- Si no, confía en tus botellas de plástico. El truco consiste en agujerear la base de la botella, llenarla de agua y clavarla en la tierra, con el tapón hacia abajo, la planta absorberá lo que necesite.
- Si no tienes ni tiempo ni ganas para entretenerte con las botellas, venden unos regadores de arcilla o unas bombillas de riego, esos artefactos que se llenan de agua y la liberan lentamente para mantener las plantas hidratadas por más tiempo, son una buena opción.
- Si se trata de unas vacaciones de verano, es necesario tener mucho cuidado con el calor y llevar las plantas al lugar más fresco de la casa. Las temperaturas más frescas evitan que las plantas se sequen, pero no olvides que además de estar hidratadas las plantas necesitan luz, pero no las dejes donde les de la luz directa todo el día.
- El autorriego, consiste en un sistema automático de riego dotado de un temporizador que proporciona el agua necesaria a las plantas a intervalos programados. Puede servir para una sola planta o para grupos de hasta unas 10 plantas. Es por lo tanto un sistema muy práctico, aunque es el más caro.
- Cubrir la planta regada con una bolsa de plástico en la cual se hayan realizado dos agujeros para que pueda respirar. Hay que evitar que el plástico toque la planta, porque el exceso de humedad en él depositada podría perjudicar el ejemplar. Para ello se colocan unos palos o caños verticales fuera de la planta y se apoya la bolsa sobre ellos.
- No es buena idea cerrar todas las puertas y ventanas, pues para que las plantas vivan adecuadamente necesitan que el aire se renueve. Es perjudicial dejar las plantas en una habitación cerrada porque el aire se vicia.
¿Y si les ha faltado agua?
Debes saber que es más fácil salvar una planta a la que le ha faltado agua que al revés.
Si a pesar de todos los cuidados, tus plantas han sufrido en tu ausencia, sumérgelas urgentemente en un cubo de agua hasta que la tierra esté totalmente húmeda. Luego la dejaremos escurrir bien antes de colocarla en un lugar adecuado. No dejaremos que quede agua en el plato inferior. Cuando la planta se reanime, colócala en un lugar sombrío.
Si eres de las personas que viajan muy seguido, opta por plantas que necesiten poca agua (o nada) para vivir. Los cactus y, en general, todas las plantas que tienen las hojas rígidas o compactas son el ejemplo perfecto. Decídete por estas mejor que por otras.