Esta macroalga, se alimenta de residuos orgánicos que provocan que su tamaño se duplique cada 18 días.
El sargazo es una macroalga marina parda del género Sargassum. Se le puede ver flotando en la superficie del océano. Está compuesto principalmente de dos especies, S. natans y S. fluitans.
Sirve como hábitat importante para muchas especies marinas, ya que proporciona alimento, sombra y refugio de peces, camarones, cangrejos y tortugas.
En el verano de 2013, en el Caribe Mexicano se reportó la llegada de cantidades atípicas de esta macroalga a las costas. Esto continuó de forma esporádica durante los siguientes meses, hasta que a finales de 2014 y durante 2015, esta situación se volvió constante.
Este 2018, durante los meses de marzo, abril, mayo y junio, se presentó nuevamente la llegada de cientos de toneladas a diferentes playas de Quintana Roo.
Este arribo masivo es ocasionado por múltiples factores como el aumento de nutrientes, de la temperatura del agua, cambio climático, contaminación generada por los humanos y de corrientes marinas y vientos.
Esta macroalga proviene de dos lugares: el Mar de Sargazo, cerca de las Islas Bermudas, y recientemente del norte de Ecuador. Se acumulan frente a las costas de Brasil, y gracias a las corrientes marinas, entran al Caribe.
El sargazo crece rápidamente porque residuos orgánicos de todo tipo se convierten en nutrientes que fertilizan a la macroalga, lo que provoca que su biomasa se duplique cada 18 días, lo que rebasa por mucho el equilibrio ecológico.
Una de las complicaciones de la llegada masiva del sargazo, es que se acumula en las orillas de las playas, éste se descompone y comienza a emitir un olor fétido, proveniente de los gases que suelta el sulfuro de hidrógeno. Además, la multiplicación del sargazo está costando pérdidas monetarias a la industria del turismo.
Aunque ya hay varios grupos que intentan aprovechar al máximo el sargazo que llega a las playas mexicanas, usándolas como fertilizante o para crear ciertos productos, o como alimento para ganado, la continua llegada de sargazo, tarde o temprano causará un cambio en el ecosistema de estas costas.
Las investigadoras de la UNAM advierten que es necesario la creación de un organismo central que actúe para la detención de la llegada del sargazo, así como para la limpieza efectiva de las playas, y para el desarrollo de una solución permanente.