Poco a poco las casas se van convirtiendo en lugares adaptados a las necesidades de hoy en día con diseños cada vez mejor estructurados y pequeños, pero muy bien aprovechados.

El objetivo es conseguir espacios luminosos, abiertos y sin barreras, inspirados en lofts de diseño. Es un estilo decorativo que tiene muchas ventajas por su versatilidad. Aunque también tiene algunos inconvenientes importantes, como por ejemplo limitar ambientes. Éste fenómeno nos lleva a la búsqueda de soluciones alternativas e ingeniosas que nos permitan sacar el máximo partido a nuestro hogar.

Con diseños de muebles pequeños, multifunción y estancias totalmente abiertas así como elementos que rompen las reglas y se disponen en lugares diferentes buscando únicamente la comodidad del usuario. Por eso es tan importante escoger los muebles, los complementos y los textiles adecuados para cada rincón de la casa. Empezando primero, por limitar nuestras habitaciones.

El color

El color es uno de los mejores recursos para dividir ambientes. Es una opción rápida, visual y económica que viene muy bien sobre todo para espacios. Para mantener un cierto orden y respetar el espacio de cada uno, una opción es delimitar la zona con un color, incluso puede haber un tercer color para alguna zona compartida.

Plantas

No necesitas gastar mucho dinero ni tampoco hacer obras en casa, porque con algo tan sencillo y decorativo como las plantas y flores puedes separar habitaciones y decorar naturalmente. Para delimitar correctamente las habitaciones, nuestro consejo es que utilices plantas y flores grandes. No olvides tampoco, escoger macetas decorativas y con un estilo en armonía con el resto de tu estancia, es decir, intenta escoger tus plantas y flores teniendo en cuenta el resto de tu decoración.

Desnivel

Los suelos a distintas alturas también es una opción muy eficaz para dividir espacios sin recurrir a muros o paredes. Sin necesidad de crear grandes desniveles, simplemente con un pequeño escalón ya estamos delimitando un espacio. Por ejemplo, la zona de cocina más alta que el salón o la zona de baño más alta que el vestidor puede ser una muy buena solución para separar de manera cómoda las distintas áreas de tu hogar.

Alfombras

Un complemento decorativo tan sencillo como las alfombras también puede ayudarte mucho a separar diferentes habitaciones integradas en un único espacio. Por ejemplo, puedes colocar una alfombra grande en una habitación y dejar la otra estancia desnuda para saber que son dos ambientes diferentes. Gracias a sus colores y texturas, podemos delimitar fácilmente una sección o resaltarla. Y de la misma manera, podemos separar visualmente los ambientes si optamos por suelos con diseños diferentes.

Cristaleras

Nos ayudará a separar los espacios sin perder amplitud y luminosidad. Y además añadirá personalidad y estilo a nuestra decoración. Una pieza singular, una ventana reciclada de estilo industrial o inglés. Podemos encontrar una que vaya acorde con el resto de decoración de nuestra vivienda y disponerla como prefiramos: hasta el techo, en mitad de la sala, saliendo de la pared, infinidad de posibilidades.

Cortinas

Es un clásico y además es una opción económica y práctica para establecer una rápida división de espacios. Es ideal para aquellas estancias en las que buscamos un poco más de intimidad como el dormitorio o el baño.

Se recomienda el uso de tejidos ligeros, con colores y estampados discretos que dejen pasar la luz para ésta opción. Hay que recordar cuál es su función y evitar caer en diseños demasiado llamativos y densos que se lleven todo el protagonismo.

A parte de estos recursos, siempre tendremos el famoso biombo, la opción de levantar pequeños muros bajos, los paneles móviles o separaciones de pared incompletas que no lleguen hasta el final, simplemente para delimitar. Es importante recordar que sea cual sea la forma que escojamos, lo importante es organizar mejor los espacios abiertos delimitando las zonas para cada uno de los usos dentro de nuestra vivienda.