RenovaCare, una compañía biotecnológica estadounidense centrada en el desarrollo de terapias con células madre.
Un equipo de científicos del McGowan Institute for Regenerative Medicine (MIRM) de la Universidad de Pittsburg, en Estados Unidos, ha desarrollado una novedosa técnica que permite curar las quemaduras de segundo grado, en mucho menos tiempo del que hasta ahora se tardaba en sanarlas.
SkinGun es una pistola capaz de curar las heridas. El dispositivo, desarrollado por la compañía biotecnológica estadounidense Renovacare, permite curar las quemaduras de la piel de los pacientes, gracias a un ‘disparo’ de células madre del paciente.
El proceso es el siguiente: primero, se realiza una biopsia o extirpación parcial de tejidos, de partes de la piel del quemado que no han sido dañadas. A partir de esta muestra, se aíslan células madres sanas en una solución acuosa. Esta solución es la que se aplica con el spray en quemaduras. Dichas células tienen la capacidad de autorrenovarse mediante divisiones mitóticas o bien, continuar la vía de diferenciación, para la que está programada y así, producir células de uno o más tejidos maduros.
En los ensayos que ha llevado a cabo RenovaCare, SkinGun ha demostrado tener una eficacia mucho mayor que otros métodos tradicionales. Por ejemplo, en una superficie con 8 centímetros de diámetro, el dispositivo dispara más de 20.000 gotas de la solución con células madre, mientras que otros sistemas sólo pueden aplicar 91 gotas mediante la utilización de una jeringuilla.
Por ahora, esta técnica puede usarse sólo con quemaduras de segundo grado (que son aquéllas que traspasan la primera capa de la piel, y dañan la segunda, la dermis) pero se espera que en el futuro, este sistema avance para poder tratar con él también, quemaduras de tercer grado (que son las que penetran por todo el espesor de la piel, destruyendo el tejido hasta producir necrosis).