La mayoría de los especialistas coincide en que los espacios abiertos y fuera de urbes superpobladas serán los que mayor crecimiento tengan, por este motivo, se ha analizado la dinámica del mercado de vivienda para identificar las nuevas tendencias. 

Con mayor frecuencia en las grandes ciudades, las viviendas más demandadas son las que cuentan con áreas amplias y ventiladas como jardines, roof garden o penthouse; mientras que en el resto del país se privilegian los destinos boscosos o de sol y playa. 

Del mismo modo, se puede observar que el crecimiento inmobiliario para vivienda ha impulsado regiones diversas como franjas costeras, regiones del Bajío y poblados del norte. En la costa destacan Baja California, Mérida, Riviera Maya o Riviera Nayarit; en el centro del país, ciudades como Querétaro y Guadalajara; mientras que en el norte figuran municipios como San Pedro Garza García, el más seguro de todo México.

Este panorama da paso a la interrogante sobre si estamos ante la descentralización de vivienda urbana que se movilizará hacia destinos alternos a lo largo y ancho del territorio nacional.

En este sentido, el sureste mexicano destaca como uno de los principales destinos para inversión inmobiliaria, tanto por sus atractivos naturales, alta demanda de hospedaje turístico y ciudades con mayor índice de seguridad, lo cual, le da amplio aumento a la plusvalía. 

Por otro lado, 2020 pasará a la historia como el año en que la industria inmobiliaria tuvo que reinventarse; el sector se ve obligado a usar a su favor nuevas tecnologías que facilitan la compra-venta de propiedades, generando experiencias vívidas de manera on line, pero también exaltando la parte humana de una de las transacciones más importantes en la vida de una persona. 

Esta es la punta de lanza de un cambio abrupto para el sector, donde se tiene que exaltar la construcción de nuevos desarrollos que den protagonismo a la sostenibilidad y cuidado del medio ambiente; generación de desarrollos con más espacios abiertos; visibilidad de nuevos destinos para construir desarrollos de vivienda; así como mayor apertura a inversión extranjera, principalmente hablando de zonas turísticas.