Son ideales para crear islas o canteros, o como barreras para delimitar la vegetación en terrazas.
Las empalizadas de madera en rollo se emplean como delimitaciones, retención de pendientes, protección visual o elementos de estructuración. En muchos casos más que para las vallas, este tipo de empalizadas se suelen colocar en islas de jardín o como barreras para las zonas de la vegetación en jardines y terrazas.
Estas vallas de madera son también ideales para decorar aquellas zonas de difícil acceso del jardín, tales como las nivelaciones o los escalones.
En cualquier caso, las vallas hechas a partir de empalizados de madera, quedan ideales en cualquier tipo de jardines y patios exteriores, incluyendo en aquellos que cuentan con un diseño contemporáneo y de estilo minimalista; ya que los diseños paisajistas de muchos de los jardineros profesionales, buscan elementos hechos a partir de materiales siempre naturales.
Las vallas y cercados no sólo se utilizan para separar diferentes zonas del jardín sino que también pueden usarse con fines decorativos. Si existe el interés de colocar en el jardín una valla, se recomienda que previamente se tenga clara la función que se quiere dar.
Normalmente se encuentran en madera tratada para el exterior, por lo que resultan muy resistentes a los cambios climatológicos, lluvia y a la exposición de los rayos solares, además no necesitan un mantenimiento demasiado dificultoso.
Las vallas de jardín fabricadas con empalizados de estacas de madera, son una excelente opción desde el punto de vista práctico y estético.
El aspecto natural de la madera encaja a la perfección en los paisajes de exterior y además se pueden conseguir acabados diferentes según el modo de colocación de las estacas, el tamaño y forma de las mismas. Se pueden elegir estacas de formas cilíndricas o rectangulares, según lo que se requiera.